XPERIA T

El juicio estaba visto para sentencia, todas las principales marcas de telefonía han mostrado ya su totem con el que competir en un apretado mercado, pero echábamos aún en falta a una nipona que no quiere perder su parte del pastel sin antes pelearlo. Hablamos de SONY.
Los japoneses, dispuestos a dar un cambio radical al departamento de telefonía de la marca desde que adquirieran la totalidad de la joint adventure (Sony-Ericcson), nos muestran cuales son sus armas para plantar cara a los estandartes del sector (SGSIII, HOX, Lumia 920…) y han querido ponernos los dientes largos con su nueva joya de la corona, el SONY XPERIA T.
En el frontal nos encontramos con una pantalla de 4.55 pulgadas de 1280×720 píxeles que nos dan una nada desdeñable cantidad de 323 PPP. A todo esto da alma tecnología LCD empujada por el motor BRAVIA de los de Tokio.
Los colores que nos ofrece son armónicos y sin virajes extraños, con un contraste muy ajustado a lo real. Si hay algo en lo que pudiese mejorar aún es en los ángulos de visión, algo cortos en las inclinaciones más extremas ( y también inverosímiles).
Su espalda está confeccionada en una sola pieza de plástico mate, inseparable del cuerpo del terminal,  por tanto imposibilita el acceso rápido a la batería, – este hecho disgustará a muchos pues el grosor del XPERIA T (9.35 mm) no es suficientemente delgado como para justificar esta decisión en su construcción-.
Queda huérfano de la estética XPERIA que con tanto empeño introdujeron los nipones, pero a cambio nos ofrece un perfil arqueado que recuerda al laureado  XPERIA ARC y una sensación de solidez en la mano que pocos consiguen.
En su lateral derecho encontramos los botones de encendido, volumen y cámara; además de una pequeña tapa que alberga bahía para tarjeta microsim y microSD.
Siendo un SONY la cámara debe de ser un  baluarte indispensable, y en esta ocasión no habrá excepción. Un sensor  CMOS Exmor™ R de 13.1 megapixel ( la cifra eriza el vello) acompañado de flash LED se encarga del apartado fotográfico. Por lo que nos han ofrecido en forma de material multimedia parece realmente rápido a la hora de hacer foco.
En lo relativo a potencia bruta el Qualcomm Krait MSM8260-A de 1,5 GHz de doble núcleo es el músculo de este aparato. Cuenta además con 1GB de memoria RAM.
El encargado del apartado gráfico recae sobre una GPU Adreno 225.
En cuanto a conectividad no faltan los ya protocolarios NFC, Bluetooth 3.0, MHL, DLNA y un largo etcétera.
Con esta simbiosis de tripas electrónicas y el empuje de ICS (SONY promete actualizar pronto a Jelly Bean) la solvencia está garantizada.
Apetitoso, ¿verdad? quizá el precio es la gran pega de este dispositivo que pretendía ser la pica en Flandes de los de Kazuo Hirai…